Mi experiencia del Design For Change
Este año, en la asignatura de Fundamentos y Didáctica de la Historia hemos llevado a cabo un proyecto denominado Design For Change, el cual nunca antes habíamos oído hablar de él. Este en un primer momento consiste en un trabajo de reflexión, pues supone enfocar el aprendizaje desde una nueva perspectiva en la cual el alumnado es el centro de su propio aprendizaje, en este tipo de enseñanza se deja atrás la posición del docente por encima del alumno, pues ahora están en la misma altura. Esto, permite que se pueda crear un ambiente facilitador.
La metodología que sustenta este proyecto es el Design Thinking que permite desarrollar competencias a través de la resolución de retos que surgen del alumnado. Destaco la creatividad, la empatía, trabajo en equipo y pensamiento crítico. Este proyecto lleva consigo 5 fases diferenciadas: siente, imagina, actúa, evolúa y comparte.
En el caso de mi grupo y yo tratamos el tema de los mitos con los niños de 2º de Educación Primaria. Fuimos al Colegio Internacional Kolbe para ayudar al alumnado a construir un empoderamiento de ellos mismos. Utilizamos los mitos que tenemos del los superhéroes, es decir, esas creencias que consideramos que solo alguien sobrenatural puede tener. Quisimos hacerles ver que ellos también pueden serlo, pues las virtudes que cada uno de ellos y ellas tenían era digna de admirar.
En mi caso fue mi primera toma de contacto en un aula como profesora. Los nervios estuvieron presentes, haciéndome recordar que esto era la recompensa de muchos años atrás, de luchar por querer conseguir mi sueño: educar a niños y niñas conceptos desde un lado emocional, teniendo en cuanta que ante todo somos personas y que eso ha de predominar por encima todo, por lo que considero que el desarrollo personal es de vital importancia.
Finalmente, conseguimos que los niños y niñas dejasen atrás sus pensamientos previos y empezaran a construir un aprendizaje desde sus propias fortalezas, haciéndoles ver que ellos pueden conseguir todo aquello que se propongan.
Y me pregunto, ¿hay acaso mejor forma de empezar en un aula que esta? No, ¡no lo creo! ¿Y tú lector, te atreves a dar el cambio?
Laura Ledesma Molina
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